El solar donde se ubica este edificio está situado en el Parque tecnológico del Camp de Reus, siendo uno de los primeros edificios construidos. La situación aislada de los edificios, así como su uso representativo de la propiedad, obliga a hacer un edificio singular, donde se ha tratado el edificio con un volumen compacto de color oscuro, que se ve disgregado i retranqueado en la zona de acceso con una gran pérgola para enfatizar la fachada y la relación con el entorno del Parque tecnológico.

El sótano del edificio, destinado a aparcamiento, se ha dispuesto con un patio inglés en el lado opuesto de la rampa, lo que permite ventilar e iluminar de manera natural la planta. Se ha realizado un tratamiento verde de los espacios exteriores en consonancia con el diseño del polígono.

La cercana presencia del aeropuerto de Reus obliga a desarrollar el edificio con muchas restricciones de altura, condición aprovechada para dar al edificio un aspecto más compacto, dado que no puede sobresalir ningún elemento en la cubierta más allá de la línea de protección aérea.

La estructura del edificio es de pilares metálicos y forjado de losa maciza de hormigón. Este sistema permite trabajar en taller los diversos pilares estructurales resistentes y montarlos a toda altura en la obra, con el consiguiente ahorro de tiempo de montaje y el mayor grado de fiabilidad en cuanto a calidad. El mismo aspecto de facilidad, velocidad de montaje y fiabilidad, se consigue con la formación de forjados a base de losas macizas.

La fachada se resuelve por medio de una fachada ventilada con aislamiento térmico por fuera del elemento resistente, consiguiendo un mejor funcionamiento térmico global del edificio, aprovechando de una manera más eficaz la inercia térmica de los cerramientos. Este elemento de cierre se reviste interiormente con el trasdosado de yeso laminado con interposición de aislamiento de lana de roca.