La propuesta se articula mediante un primer edificio de planta baja, cuatro plantas tipo y dos plantas sótano que, situado en una posición predominante en la parcela, hará de testero y de fachada principal del conjunto de naves industriales que se encuentran a continuación.

Este primer edificio está compuesto por una serie de locales diáfanos sin uso específico. Todos ellos estarán dotados con las tomas de instalaciones, preparados para que los futuros usuarios los adapten a sus necesidades específicas.

Estructuralmente, el edificio se resuelve mediante un forjado reticular de hormigón y pilares metálicos. Las fachadas se aplacan de piedra y chapado con material metálico que sirve para agrupar las diversas ventanas, consiguiendo un salto de escala en la imagen de la fachada, y por tanto del edificio, de acuerdo con el entorno.

Las naves industriales se resuelven con pórticos de estructura prefabricada de hormigón y cerramiento de panel sandwich de hormigón.